17 de abril de 2009

ALLÍ DONDE ESTÉS...


Te has ido demasiado pronto, y sin avisar, y sinceramente aún no me lo puedo creer.


Me quedan tantas y tantas cosas por preguntarte, tantas cosas que me gustaría saber de ti, tantas cosas que seguro aún me tenias que enseñar…


Teníamos que ir a la Plaza Redonda, tenías que enseñarme a hacer punto para hacerle más vestiditos a Ana Paca, tenías que venir a mi boda, malcriar a tus futuros bisnietos… Tenía que enseñarte y contarte tantas cosas… Hay tantas cosas que me gustaría que vieras, tantas veces que te voy a recordar…


Pero bueno… esto ya no va a poder ser, así que solo me queda darte las gracias por todas las veces que me has cuidado, todas las veces que me has reñido, todas las que me has mimado… Y pedirte perdón por las veces que he sido “una descarà” o “un pendó desorellat”, o cualquier otra ocasión que pueda haber actuado de alguna manera que no te haya gustado…


Yo no se donde te encuentras ahora, pero se que estés donde estés me vas a cuidar, así que voy a pensar que no te has ido, y que vas a estar siempre a mi ladito cuidándome.


Allí donde estés un besito muy grande y un achuchón yaya


- Un Beset molt gran de la teua xiqueta -



22 de noviembre de 2008

AÑO 2008

5, 4, 3, 2, 1 ... Bienvenidos al 2009.

Dentro de nada volveremos a vivir las campanadas de la Puerta del Sol y el año 2008 pasará a la historia.

El 2008 será recordado en los libros por el año en el que un afro americano fue elegido presidente de los EE.UU., será recordado por la crisis económica mundial, por la reunión del G20 + 2, por las Olimpiadas de Beijing... Estás serán las grandes aventuras del 2008.

En cambio yo lo recordaré como el año en el que aprendí que la vida es muy corta.

El año en el que aprendí que los hermanos pequeños acaban haciéndose grandes, que esos bebés que viste nacer ya han entregado su primer beso, que incluso tu primer sobrino, tan pequeñito que era, ya corretea a sus anchas.

El año en el que aprendí que las fechas no son tan importantes, que cualquier día es bueno para reír, para llorar de alegría, para quedar con amigos que tenías en el olvido, para quedar con los de siempre, para ver a tu familia... Para hacer esas cosas tan cotidianas o para hacer las más novedosas porque habrá días que irremediablemente no podremos reír o no podremos llevarlas a cabo.

El año en el que aprendí que no podemos atrapar el tiempo, sólo podemos intentar aprovecharlo. Y como dice mi hermana pequeña el tiempo no se malgasta sólo se aprovecha mejor o peor.

Por lo tanto, da igual que la Navidad que está llegando sea nuestra primera Navidad o la vigésimo cuarta, como no podemos saber con certeza si va a ser la última, permítanme darles un consejo, DISFRÚTENLA, porque la vida es cíclica pero CADA MOMENTO ES ÚNICO.





Ofertas Atrápalo
Votar
Ver otros participantes